Cuestionan concurso en Radio Nacional
La Asociación de Periodistas de Bariloche manifestó su "abierto rechazo a la modalidad elegida por LRA 30 Radio Nacional para tramitar los concursos destinados a incorporar un periodista y un coordinador artístico en la emisora de esta ciudad". "La falta de difusión masiva y suficiente de la primera convocatoria, con cierre en febrero pasado, ya fue objeto de cuestionamientos desde nuestra organización y también de otras, lo cual obligó a reprogramar el llamado", destacaron.
"El legítimo interés por cubrir los cargos ofrecidos se extendió entre los colegas y los postulantes se multiplicaron. Varios de ellos son afiliados de la APB. Pero Radio Nacional nunca terminó de dar al proceso de selección la debida transparencia. Los jurados valoraron los méritos de cada uno y definieron a los ganadores en una resolución que nunca fue publicada oficialmente", puntualizaron.
En esta línea afirmaron que "tampoco fue posible conocer los parámetros con los que se guió el jurado y mucho menos cotejar los puntajes, antecedentes y capacidad de los preseleccionados y de los ganadores del concurso. La entidad convocante de la compulsa pasó por alto el reglamento en el punto que la obligaba a comunicar de manera "fehaciente" a los concursantes la calificación obtenida y el orden de mérito, para permitir eventuales impugnaciones".
Más allá de esa omisión, "la APB cuestiona en general la escasa voluntad demostrada por la radio pública por garantizar concursos claros y transparentes. Una consulta cursada por nota a las autoridades de la emisora para conocer más detalles no obtuvo respuesta alguna".
Desde el gremio resaltaron que "no se juzga la preparación, trayectoria o merecimientos de los seleccionados. Pero la exigencia de los trabajadores de prensa representados por este gremio no sólo remite al respeto estricto de lo reglado, sino a la aplicación de políticas que aseguren la igualdad de oportunidades y la más amplia publicidad de todo lo actuado. De otro modo campean, justificadas, las sospechas de arbitrariedad o manipulación".
Por último destacaron que "ese criterio no debería ser sólo una opción voluntaria del funcionario de turno sino un estándar obligatorio en el manejo de los dineros públicos y en la asignación de puestos laborales en cualquier organismo del Estado".
