Arrollar animales intencionalmente es un delito penal en nuestro país

Atropellar animales es algo cotidiano en Bariloche y en todas partes del mundo. Los hechos recorren las redes día a día. Algunos frenan, otros simplemente no lo hacen ya que no consideran que la vida de un animal valga más que la vida humana. En el caso de los equinos sueltos u otros animales de gran porte, el conductor frena, ya que no quiere poner en riesgo su integridad física ni la seguridad de su vehículo.

Ley nacional 14346 promulgada en 1954 dice en su artículo 3 párrafo (7).

Lastimar y arrollar animales intencionalmente, causándoles torturas o sufrimientos innecesarios o matarlos por el solo espíritu de perversidad. (Es una ley penal).

Lo cierto es que los accidentes ocurren y si bien en algunos casos no se pueden evitar. Hay que detenerse, auxiliar al animal y llevarlo al veterinario, o bien coordinar su auxilio con una agrupación protectora de animales domésticos. Por supuesto que los gastos corren por cuenta de quien lo atropelló.

Para reflexionar

Imagine que sucedería si todos frenaran o anduvieran más despacio, imagine la educación y la enseñanza para sus hijos o vecinos en ese momento crucial donde usted decide sobre la vida de un animal que tan solo cruza la calle como lo haría su hijo de 3 años.

¿Ha pensado por un momento cómo se sentiría si el caso fuese a la inversa?

No hay forma de comprender o evaluar una situación a menos que uno se ponga en el lugar del damnificado ya sea animal o persona. Obviamente si todos hicieran esto, la sociedad funcionaria mucho mejor, tendríamos menos accidentes, más solidaridad, más tolerancia y menos prejuicios.

Es cierto que no podemos poner un inspector de tránsito por cada automovilista, y no siempre podremos ser testigos del hecho, Pero si estamos presentes debemos denunciar.

Si esto se pudiese implementar con la colaboración de todos los vecinos y las autoridades municipales, no habría tantos animales atropellados ni tantas protectoras u hogares de transito colapsados. Hoy las redes sociales nos ayudan a viralizar los hechos y acompañarlos con evidencia fotográfica de manera instantánea.

Pautas de convivencia dentro de una sociedad con educación cívica

El civismo palabra originaria del latín, (civis) nos indica cómo debemos comportarnos en sociedad con pautas mínimas de convivencia y respeto por todos los individuos que la componen, el respeto por el entorno natural e incluso hace referencia al respeto de los objetos públicos.

En Bariloche, no hay educación cívica y usted lo sabe. Además existe un desconocimiento total por parte de la población respecto nuestras obligaciones como ciudadanos, tal como se menciona en nuestra carta orgánica, esto debe cambiar de manera urgente.

Hace algunos días conocimos a través de la redes sociales la triste noticia de la muerte de "negro", un perrito labrador que habitaba en la terminal de ómnibus de nuestra ciudad, al igual que muchos otros animales en situación de calle. "Negro" encontró la muerte bajo una rueda.

Este caso responsabiliza a un chofer perteneciente a la empresa Via Bariloche, quien hizo caso omiso de la ley 14346 así como de sus facultades de sentido común y respeto por la vida decidiendo pasarle por encima a "negro" con una de las ruedas delanteras del vehículo de manejaba.

La denuncia fue hecha ante la U.F.A.P .(nro. de legajo MPF-BA-02179-2017 )y ante la C.N.R.T. de nuestra ciudad por el taxista José Gallardo, testigo principal del hecho y que además alimenta y cuida a los perros de la terminal, cumpliendo con su deber moral y cívico enseñando como se maneja un problema instaurado en la sociedad con paciencia, con sentido común y tolerancia.

Durante la charla telefónica que tuve con Jose, pudo manifestarme que tiene 40 años de experiencia en manejo de vehículos incluyendo los de gran porte, y me aseguro que el colectivo de diseño frontal involucrado en este hecho, tiene la visibilidad necesaria para advertir cualquier situación similar, por lo cual perfectamente podría haber girado incluso hacia la derecha y evitar asi el trágico desenlace, pero no lo hizo a pesar de haber sido advertido por los pasajeros y por empleados de otra empresa, con el agravante de dejar al animal tirado y atropellado, colocar primera marcha y retirarse del lugar.

"Negro" estaba tomando sol, sin molestar a nadie, pero su vida se apagó de golpe. También se pudo averiguar que el chofer en cuestión ya había sufrido un (escrache previo) en las redes sociales cuando en una oportunidad viniendo de El Bolsón, no le cedió el paso a una ambulancia que se dirigía a nuestra ciudad.

Si hubiese sido un niño el que estaba tomado sol, ¿también lo hubiese hecho?. Obviamente que no, es por eso que dicha actitud demuestra un claro desprecio por la vida de un animal inocente.

La justicia deberá determinar la pena y la multa correspondiente referente a este hecho; incluso la empresa debería sancionarlo como corresponde ya que este tipo de actitudes damnifica mucho la imagen de la misma.

David Telmo.