Su nombre es Lilananda Castro, nació en Colombia. Aunque no le gusta definirse se reconoce como una activista consciencial. Desde hace muchos años se dedica a compartir su experiencia. Mediante libros, conferencias y charlas hace un llamado a la consciencia. Su tarea es inspirar y motivar a las personas a pasar de ser humanos mentales a humanos conscientes.
”La mente hipnotiza” expresa en su último libro llamado “De lo denso a lo sutíl” y explica que “la mente es una de las circunstancias más complejas del Universo; pero al salir de ella y percibir la inteligencia, la vida fluye libremente y sin dificultades. Solo es cuestión de evolución”.
Como un duende travieso que intenta llamar a la sensatez, su figura se presenta amable y cercana. Su mirada es clara y amorosa, su voz fluye con suavidad y sencillez entre las palabras más simples y las ideas más profundas. Luego de andar distintos caminos decidió dedicarse a compartir sus conocimientos como una forma de completarlos. Con ese espíritu llegó a nuestra ciudad. El pasado viernes brindó una charla muy interactiva e intensa llamada “No podemos cambiar la realidad desde el mismo nivel de conflicto en que la hemos vivido”.
“Hay una paz agresiva en el ambiente” dijo Lilananda haciendo referencia a lo que percibía de Bariloche. Y es que todo el tiempo, de muchas maneras, recibimos información y debemos estar atentos para saber decodificarla. Entenderla. Para eso debemos estar abiertos y lo suficientemente atentos para filtrar tantos ruidos y encontrar lo esencial. Justamente la mente muchas veces es una fábrica de ruidos. Miedos, prejuicios, falsas expectativas, innecesarias necesidades y tantos otros ruidos. Lilananda propone armonía, despertar a la consciencia para lograr acceder al poder que somos y así ponernos en funcionamiento. Porque no creemos en él y ahí está el desafío.