Construyen la primera academia de sustentabilidad de la Patagonia
Se trata de una construcción 100% autosustentable en Meliquina. Una experiencia de trabajo colectivo que tuvo que detenerse por el rechazo de un grupo de vecinos. Una situación que, más allá de la polémica, demuestra la necesidad de un cambio de paradigma
En un contexto de crisis compleja como la actual, con graves niveles de destrucción y contaminación ambiental a la hora de generar la energía que necesitamos, que también se traduce en una mayor inequidad social con tarifas imposibles de pagar que empobrecen y degradan la vida de miles de personas, esta situación que se presenta en Meliquina es para reflexionar. Los aspectos antes mencionados deberían coincidir en un punto de inflexión que nos impulse a repensar los procesos de desenvolvimiento humano desde una perspectiva radicalmente diferente. Como sociedad deberíamos situarnos, como sugería Einstein, fuera de los esquemas de pensamiento que crearon el problema. De eso hablamos cuando mencionamos la necesidad de cambiar el paradigma.
Aunque hay resistencias, que responden a la lógica propia de esos esquemas de pensamientos que debemos superar, una nueva actitud se abre paso generando nuevas formas de organización humana. En este sentido la ONG “Movimiento de Sustentabilidad” comenzó en la localidad neuquina de Meliquina a construir la sede de la Academia de Sustentabilidad, la primera de la Patagonia. Un proyecto de trabajo colectivo del que participan varios voluntarios de Bariloche con el objetivo de aprender bioconstrucción trabajando en la obra de un edificio 100% autosustentable. Esto significa que se optimizan los recursos naturales mediante distintas técnicas a fin de generar la propia energía que se va a consumir, es decir una construcción absolutamente libre e independiente. Parece impensado o imposible pero podes olvidarte de pagar el gas y la luz. El propio edificio genera todo lo que se necesita, hasta alimentos. Para esto se reutilizan residuos comunes como neumáticos de autos, botellas de vidrio, de plástico, latas de aluminio y todo tipo de descarte que ingeniosamente se resignifican dándoles otros usos y transformándolos en eficientes materiales de construcción. El sistema de la edificación tiene un impacto ambiental mínimo. En esta experiencia, llamada “Nave Terra”, se ponen en práctica conocimientos de bioconstrucción, arquitectura bioclimática, recolección de agua de lluvia, reciclado de materiales locales, termo tanques solares, huertas orgánicas, permacultura, tratamiento de aguas grises y negras, etc.
La obra está parada porque vecinos se opusieron al proyecto presentando una denuncia por contaminación y expresando su rechazo en las redes sociales. El principal motivo es la resistencia a los materiales que se emplean. Aunque está todo en regla, la ONG decidió detener los trabajos para evitar el malestar de este grupo de vecinos.
Andrés Galeano presidente de la ONG afirmó que este rechazo se debe a la desinformación. Así lo expresó en el programa de radio “Ideas Circulares”. Escuchalo:
Galeano explicó que “una de las principales características de estas construcciones es que no utilizan ni calefacción ni aire acondicionado, o sea no están conectados a ninguna red. Trata sus aguas y capta el agua de lluvia. Es un diseño bioclimático orientado de tal forma que recibe la luz del sol durante todo el día. El muro sur de neumáticos capta ese calor, lo retiene y lo libera cuando el sol no está. Entonces mantiene el lugar en una temperatura entre 17 y 24 grados”.
Lo que está pasando con los aludes en Brasil, las altas temperaturas insoportables en muchos lugares del país, las tarifas inaccesibles de servicios que son derechos, deben hacernos reaccionar. Como dice Andrés Galeano: “no llegamos a comprender que estamos en un momento crítico de la humanidad. Las cosas tal y como las conocíamos van a dejar de existir para pasar a otra forma de vida totalmente desconocida donde los factores climáticos pasarán a jugar un rol tiránico sobre la sociedad. Sino detenemos esto a tiempo la vamos a pasar muy mal”. “Hay que construir viviendas más eficientes, vivir de manera sustentable, entender los ciclos de la naturaleza. Trabajar en conjunto con la naturaleza y no en su contra. El paradigma del hombre conquistando la naturaleza creo que hay que dejarlo atrás y hay que entrar en un nuevo paradigma del hombre en armonía con la naturaleza. El hombre trabajando en conjunto con la naturaleza, aprovechando todo lo que da que es infinito”.
La obra de Meliquina seguirá postergada hasta nuevo aviso, mientras tanto continuarán con otro proyecto en Puesco (Chile), si hay interesados en sumarse pueden contactarse mediante el sitio www.naveterra.com.ar. Hacia allí se dirigen con toda su fuerza innovadora esperando que la peligrosa miopía de algunos no se imponga nuevamente.
Escuela Autosustentable de Mar Chiquita (Bs As, Argentina)
