17 años del trágico accidente del Cerro Ventana: Recordatorios y emociones encontradas

Este lunes 2 de septiembre se realiza el acto en conmemoración por los 17° años del accidente ocurrido el 31 de agosto de 2002 en el Cerro Ventana, donde 9 estudiantes de la Carrera de Educación Física fallecieron por una avalancha.

Como todos los años la UNCo Bariloche ha previsto realizar un acto con el objeto de mantener viva la memoria, acompañar a familiares y amigos y rendirles un homenaje permanente a Mario Sebastián Tapia; Antonio Humberto Díaz; Adrián Marcelo Mercado; Oscar Fabricio Vaccari; María Gimena López; Gimena Solange Padín; Roberto Arturo Montero; Martín Sebastián Lemos y Paolo Jesús Machello.

Marcelo Alonso, decano del CRUB, dijo en diálogo con Bariloche Opina que "nosotros hemos tomado como compromiso institucional que cada 1° de semtiembre, en este caso el 2, se realice este acto conmemorativo, y como todos los años invitamos a la comunidad educativa de la escuela 329, de quienes somos una suerte de padrinos".

Habló sobre "transformar el dolor en algo constructivo", ya que "no sirve quedarse solo en el dolor o en la bronca. Lo que sucedió después del accidente es que nosotros revisamos profundamentes nuestras prácticas y maneras de impartir clases. Se actualizaron y se aplicaron con mayor profundidad los protocolos de seguridad. Los planes de estudio que involucraban salidas de campo también fueron analizados".

Entre las actividades previstas, habrán palabras alusivas por distintas autoridades, la interpretación musical por parte de los alumnos de 5to grado de la escuela Nº 329 del Barrio El Pilar y una ceremonia de flores en el patio del Recuerdo.

También se inauguró una palestra. "Todos los años hacemos que los chicos del Pilar tengan una actividad distinta. El año pasado fue una tirolesa,  y ahora se instaló una palestra móvil que es parte de un proyecto de extensión de la Universidad, con la idea de llevarla a las escuelas primarias, para que los chicos puedan acceder a los rudimentos de la escalada", explicó Alonso.

En este sentido, señaló que "La UNCo está teniendo desde hace mucho tiempo una interacción muy importante con la comunidad. Una forma de rendir cuentas es mostrar lo que hace la universidad pública. Se puede iniciar a los chicos en una actividad que puede hacer cualquiera, como por ejemplo la escalada, como manera de estar al aire libre, cuidar la naturaleza y lograr la superación personal".

Además, está prevista la realización de actividades recreativas de montaña para los alumnos de la escuela a cargo de la cátedra Deportes Regionales Estivales del Departamento de Educación Física.

Durante todo el día se proyectará en el punto audiovisual del hall central, el trabajo interinstitucional con la Escuela 329, en el marco del Programa PILAR.

La tragedia

El 31 de agosto de 2002 se hizo una salida práctica de la materia "Caminatas" con la participación de 75 alumnos y 8 docentes divididos en dos comisiones. El punto elegido era el cordón del Cerro Ventana, de 1910 metros de altura y a 16 kilómetros de Bariloche.

Todo comenzó con una caminata a las nacientes del Ñireco, en el refugio Villa Horrible donde los excursionistas acamparon. Durante la tarde recorrieron las laderas cercanas para realizar prácticas de montaña.

El 1° el grupo se dividió en dos comisiones y uno de ellos, de 15 alumnos al mando del docente Andrés Lamuniere, comenzaron el descenso del Cerro Ventana en una tarde muy soleada, bajando una pronunciada pendiente en fila india muy cerca unos de otros.

Pero se escuchó como una explosión seguida por el corte de una placa de nieve más arriba que cayó arrastrando a los 15 alumnos y a Lamuniere hacia el cañadón metros abajo donde quedaron totalmente tapados.

Con su teléfono el docente dio aviso a la familia y a la Comisión de Auxilio del Aclub Andino de Bariloche, quienes inciaron las tareas de rescate.

El operativo comenzó por la noche. El 2 de septiembre se pudo desenterrar con vida a una de las alumnas, Liliana Alonso, quien había podido respirar gracias a una cavidad que se había formado entre los bloques de nieve compactada.

Tras varios días se pudieron recuperar los cuerpos sin vida de ocho alumnos más. Y dos meses más tarde, tras un arduo y extenso trabajo por parte de bomberos, Gendarmería, rescatistas del Club Andino y voluntarios, se encontró a la novena víctima de la avalancha, Gimena Padín, de General Roca.

Según la Asociación Argentina de Guías de Montaña (AAGM) y tal como se informó a la Justicia Federal, “la avalancha fue iniciada por una sobrecarga del manto níveo, causada por el peso del grupo de 16 personas que transitaban en fila india y a corta distancia unos de otros. Es decir que la avalancha fue detonada por el mismo grupo”.

También se determinó que de las diversas rutas de descenso posibles desde la cumbre del Ventana, “la ruta seguida por el grupo era la menos adecuada para minimizar el riesgo de avalanchas”.

“El grupo y sus guías no estaban adecuadamente entrenados ni capacitados para detectar, minimizar, ni reaccionar ante algunos de los riesgos de la montaña invernal, en particular el de las avalanchas”, fue otra de las conclusiones.

Además, se reveló que “el grupo y sus guías no estaban adecuadamente equipados para la actividad que desarrollaban, ni para reaccionar ante algunos de los riesgos de la montaña invernal, en particular el de las avalanchas”. (Bariloche Opina)