Desde “Mi granito de arena" se refirieron al proyecto escolar para cuidado responsable de mascotas

Luego de haberse conocido públicamente el proyecto referente al cuidado de perros y gatos para incluir en la currícula escolar, por las legisladoras Contreras y Yahuar (Un proyecto busca incorporar en la currícula escolar el cuidado responsable de perros y gatos), diálogamos con María Esther Cingolani" de la Agrupación “Mi Granito de Arena, castraciones en Bariloche" con la intención de despejar algunas dudas sobre esta propuesta.

- Maria Esther, en referencia al nuevo proyecto presentado por las legisladoras rionegrinas ¿Qué opinión les merece?

Si bien el título puede sonar interesante, se trata de un criterio que no puede avanzar sino que contribuye a sabotear cualquier avance, porque tenemos la absoluta convicción de que en esta etapa de sobrepoblacion de perros y gatos el proceso debe poner énfasis  en lograr que exista un estado responsable y recién cuando se haya logrado ese objetivo habrá llegado el momento  de exigirle  a la gente mayor responsabilidad.

- La ordenanza de Bariloche Cm1931/09 "control de fauna urbana" dice claramente desde  hace 12 años que el Ejecutivo debe coordinar la educación con los establecimientos. ¿Por qué ahora y no antes?

Como bien decís, la ordenanza  tiene 12 años, pasó mucha agua bajo el puente y en Bariloche  nunca se cumplió al pie de la letra la CM 1931/09, como por ejemplo la castración masiva gratuita, temprana, abarcativa, extendida y sistemática del 10% de su población  animal (perros y gatos), la educación se tiene que dar si el estado cumple con su parte esencial de prestar el servicio de salud (castración, desparasitación y vacunación gratuita ).

- ¿El cuidado responsable perros y gatos nos sacaría de este pozo o faltan más cosas?

-Nuevamente, no se le puede colgar el cartel de “irresponsable” a la ciudadanía. Un proyecto dirigido a nivel escolar que supuestamente  busca un cambio de paradigma sobre los animales,  nos demuestra una vez más que no se toma en serio el problema del "derecho animal", la familia rionegrina  como la argentina  es multiespecie. El estado debe y es su obligación estar presente con programas que protejan tanto al animal como a la ciudadanía en su totalidad. Por otra parte resulta algo insólito que no existiendo servicio veterinario público el ciudadano so pena de ser considerado irresponsable,  tenga la obligación  de pagar un servicio privado para procurarle a ese animal atención de la salud, control de reproducción, evitando a si mismo el riesgo que pudiere generar como potencial agresor o transmisor  de enfermedades a la población humana ,animal y ambiental.

- “Tenencia responsable”, término antiguo. ¿Sobre quién recae la responsabilidad: estado o ciudadania?

La tenencia responsable no es solo un término antiguo, es un concepto que encierra la total desvinculación del estado con los animales de su comunidad. Se parte de una Concepción de las desvalorización y desprecio por la gente a la que en perfecta maniobra de auto cumplidora se termina definiendo implícitamente como irresponsable. Los enfoques que descalifican  y desprecian  a la población impiden modificar positivamente y no se obtienen buenos resultados cuando desde los poderes del estado  se insiste en ver a los ciudadanos desvalorizándolos y actuando  con ellos como si fueran el enemigo  a quienes empleando  el criterio medieval de que “la letra con la sangre entra” cuando se pretende educar .

-¿ Y el proyecto 278/2020, de los legisladores Rochas y Belloso?

El proyecto 278/20 es una de las propuestas superadoras de nuestros tiempos teniendo  en cuenta  que al tener el estado presente, brindando atención veterinaria primaria gratuita (castración, desparasitación  y vacunación) para que todo ciudadano pueda acceder, y brindarle a su animal el trato correspondiente. No hay mayor educación que la que se da con el ejemplo, la presencia del Estado cambiará radicalmente el accionar de su población logrando de manera empática el cambio  de animal  descartable, por animal miembro de la familia.

Por David Telmo