El respeto por la salud y la naturaleza es el eje central de este proyecto que tiene a la cabeza a Lucia Molina, una cordobesa que reside en Bariloche hace más de 12 años. El amor por la montaña, los bosques, el lago y los infinitos paisajes hicieron que su espíritu libre elija esta ciudad como su hogar.

“Viví gran parte de mi infancia en un pueblito de las sierras de Córdoba, siempre en contacto con la naturaleza, siendo admiradora desde chiquita, de todo tipo de plantas y flores silvestres. Cuando tenía 5 años empecé a acompañar a Doña Pabla, una mujer reconocida en el pueblo por saber muchísimo de yuyos curativos, a recolectar plantas al campo. Ella me contaba de las propiedades, usos y cuidados de cada una. Sin saberlo, sembró en mí una semillita de curiosidad que fue creciendo con el tiempo” dice Lucia con una sonrisa y cierta nostalgia.

LUPULINA se destaca por la diversidad de productos, hay bálsamos curativos, ungüentos para masajes, aceites prensados en frío, jabones artesanales, bolsitas sustentables y velas ecológicas de soja. Todos los productos se elaboran con ingredientes naturales, de manera artesanal, con plantas medicinales de la Patagonia que cosechan personalmente en diferentes salidas al monte.

Entre las plantas que utilizan está la paramela, una planta nativa de la zona andina patagónica, es usada desde hace muchísimo tiempo por los pueblos originarios de la región para calmar dolores articulares, musculares y problemas circulatorios; la flor de caléndula es una gran aliada de la piel; la apara, nutre y protege, es muy buena para sanar quemaduras, raspones o picaduras; el Pañil, una especie nativa de la región andina de Chile, Perú y Argentina, en LUPULINA usan sus hojas, maceradas en aceite para aprovechar sus propiedades cicatrizantes, o también las flores de lúpulo, el cual extraen el aceite esencial la “Lupulina” que posee propiedades relajantes y antisépticas, además, es un gran antioxidante natural. Sumado a otras plantas o hierbas de la zona que usan para elaborar cuidadosamente sus productos.

“Las vueltas de la vida me trajeron a vivir a Bariloche, empecé a investigar y a crear con plantas de la Patagonia, así es como conocí a la flor del lúpulo que crece en esta zona. Fue un antes y un después para mí, me apasionó esta planta desde el principio. De ahí el nombre de mi proyecto LUPULINA, así se llama el aceite esencial de esta flor, el corazón de la planta” cuenta Lucia sobre el origen de su emprendimiento.

Otro de los valores de la marca es la colaboración con emprendedores de la zona, para potenciarse mutuamente y construir un circuito de compañerismo. “Intentamos generar una constante sinergia con emprendedores locales, también tratamos de estar presentes en exposiciones, ferias locales y regionales. Como marca priorizamos la calidad sobre el precio, nos enfocamos en recuperar y transmitir la sabiduría curativa de las plantas.” agrega LucÍa.

Del 8 al 11 de octubre todos los barilochenses o visitantes que disfruten de la feria de Bariloche A La Carta (BALC) podrán adquirir los productos de LUPULINA y conocer más sobre las virtudes medicinales de las plantas de la zona.

LUPULINA ofrece creaciones inspiradas en la naturaleza, con recetas ancestrales, pero también es una marca en constante exploración, experimentación y cambio.