El pasado domingo con unos 40 autos, se disputó la segunda fecha del Campeonato de Automovilismo que organiza la Asociación Civil Club Volantes de Bariloche, en el clásico circuito local ante un buen marco de público.

En la Fórmula 850, el piloto Fernando Ávila, oriundo de la vecina localidad neuquina de Villa la Angostura tuvo una destacada actuación. Con un andar perfecto en su “fitito” 88, fue un claro dominador y se llevó todos los puntos en juego, ganando clasificación y ambas finales, para ubicarse en lo más alto del podio, secundado por Eduardo Pérez y Jorge Matus.

Pérez, que se alzó con la victoria en la primera fecha y es líder del certamen, se ubicó segundo, en ésta oportunidad superando a Jorge Matus, luego de un entretenido mano a mano en buena parte de las carreras, que hicieron vibrar a todos los que se acercaron a presenciar la fecha.

Ambos pilotos locales tuvieron excelentes actuaciones pero debieron conformarse con el 2º y 3º escalón del podio, ya que Ávila “voló” arriba de su máquina y en ningún momento permitió que su victoria corriera peligro. Perfecto lo del angosturense que vino a Bariloche para llevarse el #1 a casa.

En la TN 1100 no hubo discusión de quien fue el más destacado, Sebastián Muñoz que regresó a correr en El Rebenque después de mucho tiempo ganó de punta a punta. Marcó los mejores tiempos en clasificación y en las dos finales, construyendo así un triunfo inobjetable. Cristian Caihuan y Matías Oreste lo escoltaron en el podio.

Hubo varios debuts, en la categoría de los Fiat 128 y 147, con pilotos como Sebastián Muñoz, Daniel Villalobos, Sandro Jara y Martín Hercigonja que volvieron a correr después de un largo periodo de inactividad y otros que al igual que ellos, habían estado ausente en la primera fecha y se sumaron a la categoría en esta oportunidad.

Seba Muñoz se subió al auto que en el arranque de certamen había conducido su padre, Marcos Muñoz y no dejó dudas para quedarse con el primer puesto, lugar que ocupó en la clasificación y las dos finales.

La divisional de los Areneros puso en marcha su campeonato 2021/22, con solo 5 autos, en una menor convocatoria que el mes pasado. Ya que también estuvieron presentes en el arranque de temporada en octubre, pero sin correr por los puntos.

El representante de Dina Huapi, Juan Manuel Maggi le ganó el mano a mano a Rubén “pato” Rodríguez, que había triunfado el mes pasado y arrancó con el pie derecho el campeonato. Daniel Barreiro completó el podio, ubicándose en el tercer puesto. La segunda final solo tuvo 5 vueltas, en lugar de las 10 que correspondían y el final fue todo confusión y reclamos.

En las primeras ubicaciones la lucha se dio nuevamente entre Juan Manuel Maggi y Rubén “pato” Rodríguez, pero esta vez la victoria fue para Maggi, que dominó todo lo que se corrió. En la final 1 se ubicó primero, por delante de Jorge Maizón y Daniel Barreyro, mientras que en la última competencia le ganó a Rodríguez y Barreyro, que se ubicaron segundo y tercero respectivamente.

Maizón que volvió a correr en el trazado local después de un largo tiempo, no pudo terminar la segunda final y relegó puntos que le sirvieron a “pato” Rodríguez para subirse al segundo escalón del podio, pese a que empató en unidades con “El Hereje” Barreyro que fue dos veces tercero, pero el segundo puesto de Rodríguez en la carrera definitiva le dio la ventaja en la clasificación general.

Como dijimos, el cierre fue con polémica. Es que antes del evento se acordó una serie clasificatoria y dos finales a 10 vueltas cada una. Sobre la marcha, el comisario deportivo decidió que la segunda final sea solo a cinco giros, argumentando que los pilotos se habían tardado demasiado tiempo en salir a pista. El error estuvo en la comunicación, ya que no le avisaron a los competidores antes de largar, según expresaron ellos mismos.

En el cuarto giro el comisario mostró el cartel de última vuelta y los pilotos no entendían demasiado, mucho menos cuando al giro siguiente le bajaron la bandera a cuadros, pero los pilotos seguían en velocidad en lo que en realidad era la clásica “vuelta de honor”.

De hecho Rodríguez que terminó segundo, dio la vuelta completa al circuito tras la bandera a cuadros, sin saber si acelerar o bajar la marcha, porque Maggi que ganó, iba en velocidad, luego se metió en parque cerrado, porque así se lo indicaban los banderilleros, se bajó del auto sin apagar el motor, para preguntar ¿Si ya había terminado?, mientras Maggi continuaba en el circuito, a esa altura ya más lento, pero confundido ¿No eran 10 vueltas? Preguntó al bajar, el ganador. Un bochorno.

Fuente: https://motorgpbariloche.com.ar/

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