Como miembro activo de la Asociación de Hormigón Elaborado, la empresa barilochense Ñire SRL mantiene desde hace años un estrecho contacto de trabajo y colaboración con distintos especialistas del sector.

Uno de ellos, es Pedro Chuet-Missé quien hasta hace poco se desempeñó como presidente de dicha Asociación, cargo que ocupó por más de 17 años. Con más cinco décadas trabajando en el rubro, y habiendo transitado por distintas áreas relacionadas con el hormigón, hoy asesora y capacita a grandes y pequeñas empresas vinculadas a la construcción.

De paso por las instalaciones de Ñire SRL, el especialista dialogó con Bariloche Opina sobre la actualidad y las perspectivas del sector.

En este sentido destacó el crecimiento exponencial de las proveedoras de hormigón elaborado con estándares de calidad en todo el país. Hoy en día, incluso en pequeñas obras, como por ejemplo una platea o una vereda o un puente, se utiliza hormigón elaborado, tanto por una cuestión de costos, tiempos, como de practicidad, explicó.

“Hace 20 años, una ciudad de menos de 50 mil habitantes no tenía su propia empresa hormigonera, sino que se hacía con el "trompito" doméstico o "a baldes". Hoy todo eso ha cambiado; las empresas han invertido en equipamiento, cuentan con plantas de elaboración, control de calidad, laboratorio, y camiones "moto hormigoneros", o "mixer”, sostuvo.

Las “revolvedoras”

Pero no todos hacen su trabajo como corresponde, reconoció. Alertó sobre algunas empresas que en los últimos años aparecieron en el mercado de la construcción, a quienes denominó "las revolvedoras”. “Son quienes juntan piedra, arena, cemento, lo baten, lo revuelven y dicen que es hormigón. Sin control, con un producto variable y sin respaldo profesional”, dijo.

“El hormigón es un elemento que debe ser "controlado profesionalmente desde el inicio hasta el final. Hay que tener en cuenta que es el elemento más usado en el mundo, después del agua”, indicó.

De ahí radica la importancia del control en todo su proceso. "Ese hormigón está en una estructura, y si no es de calidad puede hacerla colapsar. La gente confía en lo que se le entrega, y si el producto viene de una "revolvedora", se puede llevar una sorpresa, en cambio si es de una hormigonera, puede estar tranquilo”, afirmó.

Aunque reconoció que si bien los profesionales de la construcción esto lo saben, hay muchos "constructores" que no lo consideran, y asumen grandes riesgos.

Perspectiva del sector

Sobre las perspectivas del sector a corto y mediano plazo, Chuet-Missé señaló que se esperan definiciones sobre el plan de obra definida desde el Gobierno Nacional.

"Muchas obras públicas van saliendo con licitaciones que tienen algunos "componentes políticos" que las retrasan o frenan". “Todo el sector vinculado a la construcción está esperando señales en relación al plan de obra pública que se espera desarrollar por lo menos para los próximos dos años”, expresó.

Consultado sobre el impacto de la pandemia para el sector del hormigón elaborado, sostuvo que “si bien hubo un "parate" en la obra pública, la privada tomó más fuerza equilibrando así la ecuación. "El crecimiento de la venta de cemento en bolsas es récord", aseguró.

Argentina en relación al resto del mundo

El país se encuentra en un muy buen nivel técnico con respecto al hormigón elaborado, opinnó. "Tenemos el honor de contar con tecnólogos de primera línea. Los trabajos que presentan los argentinos en el exterior son un orgullo".

"Las plantas hormigoneras nuestras son un ejemplo en muchos lados. Y eso es una pauta de lo bien que viene el hormigón hacia el futuro", puntualizó.

En lo que se refiere a Bariloche, consideró que "se está trabajando muy bien, tanto en el ámbito privado, como en el público, con obras importantes que se están llevando a cabo que motorizan la actividad del hormigón elaborado. (Bariloche Opina)