Greenfield Institute, que desde hace más de 35 años acompaña la comunidad en su aprendizaje de Inglés, comenzó el ciclo lectivo 2022 con muchas expectativas y el compromiso de "dar lo mejor" sus alumnos.

Su directora y fundadora, Carlota Gamarra, contó a Bariloche Opina cómo es el inicio del año en sus dos sedes, de calle Roca 3660 en el barrio Melipal, y en Pasaje Gutiérrez 890, con presencialidad plena.

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"Para mi hoy es un día de fiesta; porque retomamos las clasese en nuestras dos sedes con las mejores expectativas como lo hacemos todos los años, auque en este de una manera especial porque estamos cumpliendo 35 años formando a nuestra gente de Bariloche", sostuvo.

Carlota Gamarra, directora de Greenfield Institute.

En este sentido, Carlotta recordó lo "importante y necesario que es el idioma como una herramienta clave para conocer lo que vive el mundo, más en tiempos tan complejos como los que transitamos".

Mencionó también que en el difícil contexto económico que vive el país, se vienen notando "ciertas limitaciones" a la hora de decidir estudiar un idioma. "Pero en Greenfield, si el problema es económico, estamos siempre dispuestos a que eso no sea una barrera si quieren adquirir el conocimiento de inglés", destacó.

Carlota habló de cómo se encara un nuevo año en Greenfield. "Con mucha esperanza. Esperando que las ganas de entrar de nuevo a una normalidad sean acompañadas con la llegada de nuevos alumnos. Hay mucho entusiasmo en todos los que conformamos el Instituto", expresó.

Sobre la matrícula, dijo que "de a poco se nota un crecimiento con respecto a años anteriores, aunque esto depende de la organización de las familias con las clases en los demás colegios".

"Nosotros desde el Instituto empezamos a trabajar con los horarios y con todo lo que se necesita para empezar un año de forma normal a principios de febrero", explicó. "Pero la diferencia en la demanda no empieza juntamente con nuestro trabajo, así que en algunos momentos se torna bastante difícil".

Puso como ejemplo casos en donde "lo que estuvo ya pautado y organizado, ha tenido un cambio drástico porque los alumnos tienen sus actividades a contraturno, o las complicaciones lógicas de los padres son sus horarios de laborales".

"Pero ya con 35 años de vida, estamos acostumbrados a que eso ocurra", completó.

Historias

Greenfield continúa siendo una fuente de historias de quienes pasaron por sus sedes. "Siempre viene alguien que nos cuenta que había estudiado en el Instituto y ahora trae a su hijo o un sobrino, porque tuvo una buena experiencia".

"También sabemos de mucha gente que trabaja fuera del país, con home office, y que aprendió inglés con nosotros. Todo eso nos llena de alegría y orgullo, y nos impulsa para hacer más", destacó.

En esto habló de los vínculos que se forman dentro de sus aulas. "Cuando los alumnos han tenido un buen año con alguna profesora, muchos quieren al año siguiente tener al mismo docente. Pero también se trata de que los alumnos cambien de profesor porque es bueno para el idioma en si. Es para tener distintos aspectos de la pronunciación o del contenido mínimo que se da en los cursos".

Finalmente, agradeció "a la vida y a la comunidad de Bariloche por la oportunidad que me ha dado durante estos 35 años. Prometo que Greenfield va a dar lo mejor en este nuevo año". (Bariloche Opina)