Cruz del Sur avanza en la Copa Argentina

Rápido, veloz, astuto, incisivo, peligroso. Atributos que esta tarde mostró Daniel Segovia. Atributos que, paradójicamente no se condicen con su apodo de Caracol.

Pero, por esa velocidad, por esa astucia y por estar siempre bien ubicado en el lugar que la jugada pedía, el delantero se pudo despachar con tres goles en sólo 12 minutos (al arranque del segundo tiempo) y le dio un triunfo clave a Cruz del Sur, sobre todo por el hecho de sacarse de encima la nefasta racha en el Estadio Municipal.

Pero, claro, Cruz del Sur no sólo ganó por eso, sino también por una serie de factores. Además de la suerte en alguna que otra jugada (un cabezazo de Alianza al palo o un remate mordido de Villagra dentro del área, ambas en el primer tiempo), hubo dos hechos clave: la magnífica actuación de Sebastián Uranga en el arco, una de las dos figuras del partido junto a Segovia; y el acierto de Labaroni con el triple cambio en el entretiempo, sobre todo con el ingreso de Maldonado.

Porque en el primer tiempo, si bien el partido no brindó mucho y fue más bien chato, la visita fue quien interpretó mejor el juego y estuvo más cerca del gol. Lo tuvo primero con el ingreso solitario del movedizo Romero al área, pero tapó bien Uranga. Lo tuvo con tiros desde afuera de Romero o de Páez y también con las ya mencionadas jugadas del cabezazo en el palo y el remate pifiado de Villagra.

Pero, sobre todo, lo tuvo con un cabezazo a contrapié de Páez que hizo estirar de forma brillante a Uranga, quien más allá de alguna salida en falso, ya se empezaba a transformar en figura. De Cruz del Sur poco y nada. Sólo intentos individuales de Zambrano y algunas aproximaciones en los últimos diez minutos. La más clara fue un desborde de Zambrano que dejó solo en el punto del penal a Pappalardo, pero que el 9 no pudo definir.

En el complemento, Labaroni no sólo hizo un lavado de cabeza en el vestuario sino que también mandó de entrada a Maldonado, Tolosa y Guille Fuentes (todos como volantes) y cambió el 4-3-2-1 por un 4-4-2, con Segovia y Pappalardo (pasó de volante a punta) como delanteros. Y los cambios dieron resultado tanto en el juego como en el marcador. Maldonado encontró la llave para abrir el partido con sendos y constantes desbordes. De hecho, el primero de ellos, a los 2 minutos, terminó con un centro atrás para el toque de Segovia a la red. Luego, a los 10, una pifia de Tapia le posibilitó a Pappalardo desbordar por izquierda y enviar un centro que parecía controlado por Gallego, pero que inexplicablemente se le escurrió al 1 y permitió que Segovia (otra vez bien parado) la empujara para el 2-0. Dos minutos más tarde, otra buena definición de Caracol dentro del área empezaba a liquidar el encuentro.

A partir de ahí Cruz del Sur dispuso de la pelota, el terreno y las ocasiones para aumentar, pero las dilapidó. Tolosa tuvo dos claras pero en una pecó de generoso y en la otra su cabezazo se fue por arriba del travesaño. Alianza llegó al descuento tras una buena jugada de Romero que dejó solo a Páez para empujarla y descontar. Incluso, el Gallito pudo haberse puesto más a tiro en el marcador, pero Uranga se hizo grande y tapó todo lo que le tiraron, incluso una brillante doble tapada espectacular.

Así, con Segovia haciendo los goles y Uranga evitándolos, el Cruzado ganó su primer partido de la temporada como local y se metió en la segunda ronda de la Copa Argentina. De este modo, llegará más confiado al choque del domingo (11.30) ante Independiente de Río Colorado por el Argentino B. (www.barilochedeportes.com)