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"Fue una situación muy rara", aseguró Juan Pablo Ferrari

El secretario de Desarrollo Humano Integral del Municipio, habló con Bariloche Opina sobre las derivaciones del episodio ocurrido la semana pasada en el Gimnasio N°1, cuando tres agentes policiales acusaron a municipales de repartir "carne podrida".

"Fue una situación muy rara", aseguró Juan Pablo Ferrari
martes 28 de abril de 2020

El secretario de Desarrollo Humano Integral del Municipio, Juan Pablo Ferrari, habló con Bariloche Opina sobre las derivaciones del episodio ocurrido la semana pasada en el Gimnasio N°1, cuando tres agentes policiales acusaron a municipales de repartir "carne podrida".

"Fue una situación muy rara", enfatizó el funcionario. "El jueves pasado tres efectivos de la Policía de Río Negro, que aparentemente cumplían su función como consigna en el gimnasio, se presentaron a la mañana y pidieron hablar conmigo. (Mirá: Municipio denunció penalmente a tres policías por abuso de autoridad)

"En un preciso momento, uno de ellos me dijo que estaba detenido, porque "esa carne está toda podrida". De manera irónica, le pregunté "cómo me podía decir eso si todavía no abierto el freezer". Me preguntaron el origen y mostré los papeles, tanto los del SENASA, la guía de carne, los remitos de entrega, las firmas de los especialistas, y quedaron como asombrados", dijo.

Ahí mismo preguntaron "sobre quienes firmaron esos documentos, y les expliqué el procedimiento, donde el camión del frigorífico llega al gimnasio, hay una persona del municipio con el personal de Inspección para revisar los kilos que entran, la cantidad de animales, y hacer los remitos correspondientes. Una vez cumplimentado, se embolsa y se friza".

"Cuando les explico todo esto me hacen llamar tanto al personal de Inspección, como al profesional que está encargado de revisar la carne. Una vez que ellos llegan, vemos como uno de estos tres policías, que hasta el momento seguía sin identificarse, saca un celular y empieza a filmar la discusión que tenían con el médico hasta ese momento, y que les hacía hincapié en que cómo ellos aseguraban que la carne estaba en mal estado cuando ni siquiera había sido revisaba".

En un momento dado, "llaman por teléfono a uno de los efectivos, que sale un momento y al regresar, habla con nosotros, y se retiran sin media palabra. Inmediatamente nos comunicamos con el Jefe de Gabinete explicando la situación, se llamó a la Comisaría 2° y hablé con el comisario, que nos dijo desconocer sobre este operativo. Esta gente nunca presentó un papel ni se identificaron".

"Lo extraño de todo esto", continuó, "fue que luego al ver las cámaras de seguridad que tiene el Gimnasio, nos dimos cuenta que este personal que estaba supuestamente en consigna había hecho un primer video donde muy burdamente manifestaban que la carne estaba podrida".

"Nos llamó la atención que esta persona dijo "la carne está podrida, que olor que hay", cuando aún no había abierto el freezer, y una vez que lo hace, nunca muestra la carne, solo mueve las bolsas, se corre hacia un costado y muestra la heladera con supuesta mayonesa vencida, que en realidad era crema que había comprado la gente de Red Solidaria el día anterior, y tampoco estaba vencida".

"Y para rematarla muestra toda la mercadería que tenemos, y dice que una firma "equis" nos entregó todo vencido, agregó Ferrari. "No le encontramos el sentido ni la mala intención que hay detrás más que generar en la gente miedo, incertidumbre, y sobre todo una bronca terrible. Por eso hicimos las denuncias penales correspondientes".

Sobre el impacto que generó lo ocurrido, "atrás de cada trabajador hay una familia, y esto nos afectó mucho. Acá se reciben y se dividen los 3500 módulos que se entregan por semana, con un equipo completo que se sintió agredido. Tratamos de hacer de la mejor manera nuestro trabajo. Se llegó a algo muy bajo diciendo que estamos entregando carne podrida a la ciudad".

"Quiero llevar la tranquilidad a la gente. Los que nos gratificó un poco es que los beneficiarios salieron luego a decir que nunca tuvieron un problema con la mercadería", puntualizó. "Los triste de todo esto es que mucha gente que donaba la carne al frigorífico, nos llamaron para decirnos que no quieren saber más nada. Esto fue un trastorno". (Bariloche Opina)

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