Ayer domingo 6 de agosto se llevó a cabo la movilización de vecinos auto convocados que defienden la permanencia de la estatua del General Roca en la plaza Expedicionarios al Desierto de Bariloche.

También estuvieron presentes vecinos de Villa la Angostura, se cantó el himno Nacional Argentino y se desplegó la bandera celeste y blanca. Se recolectaron firmas, aplaudieron y cantaron "Roca no se va, Roca no se va".

En diálogo con los ciudadanos, manifestaron su deseo de que la estatua permanezca allí, y el hecho de querer moverla o sacarla definitivamente no es ni más ni menos que una cuestión de mala política con historia tergiversada, según afirmaron.

-Aquí el problema no es una estatua de patrimonio Nacional. El problema son los actos de vandalismo ejercidos sobre la estatua y sobre la plaza del Centro Cívico. 

-La imagen de Roca siempre estuvo cuestionada y cada ciudadano tiene su opinión respecto a sus campañas al desierto y a sus dos presidencias, pero no podemos negar que gracias a Roca existe la educación gratuita y laica en nuestro país y, además fue el responsable de crear el primer ferrocarril. También nos colocó dentro de la economía mundial, solo por mencionar algo.

-Hoy queremos reafirmar la soberanía, ya que, en mayo de 1902, Roca, siendo presidente, firmaba el decreto para crear la ciudad de Bariloche. Sin eso hoy no tendríamos partida de nacimiento.

-La primera campaña de Roca se llevó a cabo cuando éste era ministro de Defensa, no Presidente. En aquella época el presidente era Adolfo Alsina.

De esta manera las tintas se cargan sobre un general de la nación que cumplió con el deber de extender los límites de Argentina.

-Con respecto a los actos de vandalismo, podemos decir que son vergonzosos, no sólo hacia la estatua ecuestre sino también hacia la plaza con la pintada pañuelos y los grafitis sobre los diferentes edificios históricos a la ciudad.

-Hoy estamos repudiado eso también. Acá quieren echar abajo los símbolos que tenemos en nuestro país. La historia no se reescribe. La historia es como es y hay que interpretarla en el contexto social económico y político de aquellos años.

No podemos hoy con una mirada progre estar juzgando hechos del pasado.

¿Qué pasaría si se llama a plebiscito para decidir si se mueve o no se mueve la estatua?

- Sería lo correcto, estamos en democracia y el pueblo es quien decide; pero creo que quienes apoyan la idea de sacarla perderían por ser minoría.

¿Qué pasa con los pañuelos?

Ese es otro tema y muy doloroso, por cierto, pero la realidad es que para rendir homenaje a los muertos de la última dictadura "cívico militar eclesiástica" no hace falta pintar una plaza.

Para hacerlo se pide permiso o se elige otro lugar; no se impone el homenaje sino el mismo se convierte en un acto de vandalismo contra el patrimonio cultural, es así de simple.

Es una pena que habiendo tantas cosas por resolver en nuestra ciudad los funcionarios se presten para escuchar y decidir sobre el reclamo de una minoría por encima del reclamo de una mayoría. Eso no es democracia, es una vergüenza. 

El debate sigue incluso a nivel nacional, y a modo de reflexion personal sólo puedo decir que es una pena ver a los ciudadanos enfrentados por estas cuestiones.

Todos podemos mantener nuestra opinión con respecto a la historia de nuestro país. Siempre dentro de un marco de respeto mutuo, hay que escuchar las dos versiones, ya que "un pueblo que no conoce la historia está condenado a repetirla".

David Telmo