El 31 de enero, Ariel Puel volvía con su auto desde la Terminal hacia Los Coihues, donde vive. En Beschtedt y Brown se detuvo para atender su celular y ahí comenzó un largo calvario que aún continúa.

Según contó en el programa Ideas Circulares, esa noche cerca de las 23, detuvo su auto para responder mensajes unos diez minutos, "y en ese momento se subieron dos personas que me empezaron a golpear, me pedían dinero. Estuve muy descuidado ya que Bariloche es una ciudad muy tranquila".

Con un delincuente a cada lado, trataron de pasarlo al asiento trasero pero no podían sacarle el cinturón de seguridad. Mientras tanto uno sacó un cuchillo y comenzó a herirlo en la pierna derecha.

"Nunca les pude ver la cara, porque ellos me decían que cierre los ojos. Finalmente me pasaron a la parte de atrás del auto y uno de ellos hizo lo mismo. Me seguían pidiendo dinero", relató.

Los ánimos fueron subiendo, y uno de los sujetos extrajo un arma de fuego y le efectuó un disparo que le produjo una fractura de tibia y peroné. Pero luego recibió otra bala a la altura de la rodilla.

"Sentí que estaba en juego mi vida. Tenía mucha sangre por todos lados, por los golpes, las cuchilladas y los disparos. En un momento me apuntaron a la cabeza y me agaché como en posición fetal pero me dispararon a quemarropa en el antebrazo", indicó. "Ahí me destrozó el hueso cerca de la muñeca. Como pude atiné a abrir la puerta y tirarme".

Esto ocurrió a unas cuadras del lugar, "pero no puedo decir con certeza donde ya que iba con los ojos cerrados. Me tiré del auto con el miedo de que frenaran y volvieran. Aún no entiendo por qué tuve que pasar por esto".

En ese lugar empezó a gritar, "tratando de que alguien me escuche. Pasó un muchacho que primero se asustó, pero finalmente se comunicó con la Policía. Luego llegó la ambulancia. Me lograron estabilizar a la madrugada".

El auto fue abandonado e incendiado en las inmediaciones y hasta el momento no se pudo dar con los autores del hecho.

Ariel llegó a Bariloche hace siete meses proveniente de Zapala, Neuquén. "Quería cambiar de vida. Trabajaba en la Municipalidad y cuando llegué me enamoré de este lugar. Pero jamás pensé que iba a terminar así".

Actualmente tiene dos clavos que sobresalen de su mano izquierda, la cual está fija, no puede caminar ya que no puede flexionar su pierna y necesita ser operado. 

"Debe ser de urgencia porque según el médico, los huesos se van soldando mal y cuanto más tiempo pasa sin conseguir las prótesis, más se complica la rehabilitación", explicó.

Lo más grave está en el antebrazo, donde quedó prácticamente sin parte del radio. Allí necesita la prótesis para recuperar la movilidad de su mano.

Todo este tiempo, junto a su familia, estuvo realizando pedidos por las redes sociales y los medios a fin de conseguir el dinero para los elementos necesarios. Vale mencionar que el costo ronda los 350.000 pesos. "Yo no tengo obra social y tengo que depender de la salud pública. Hoy no tengo los medios necesarios para solucionar esto lo antes posible".

Pidió ayuda a Defensoría del Pueblo, "pero hasta ahora no obtuve ninguna respuesta. La verdad que no sé a quien recurrir. Sé que no es tanto dinero, pero estar así hace ya 34 días, me pone muy mal. Me gustaría si la gobernadora me pudiese ayudar. Esto psicológicamente me hace mal".

Agradeció a los vecinos de Los Cohiues, a su madre, "y a todos los que cada día están tratando de ayudarme. Miro por la ventana y quiero salir".

Para poder colaborar con Ariel Puel:

Titular: Hector Ariel Puel
CUIT/CUIL: 20 - 35493305 - 6
Alias: pagameconpropina
CBU: 1430001713020105660019
NRO. CUENTA: 1302010566001

(Bariloche Opina)